Después
de años de rumores sobre la supuesta revolución de los nerds en el fútbol
británico, los rebeldes de la estadística han recibido una bienvenida por la
puerta grande a los recintos sagrados de la Liga Premier.
En el
inicio de la temporada, este fin de semana, todas las miradas se dirigirán a
Anfield en donde 10 meses después de la adquisición de Liverpool por parte de
los dueños del equipo de béisbol Medias Rojas de Boston, John Henry y Tom
Werner, el legendario club presentará el resultado de los US$170 millones que
gastó en jugadores, lo que representa a una costosa apuesta a que su estrategia
de modelos estadísticos puede encontrar gemas que otros equipos han ignorado.
Desde
la llegada de los nuevos dueños, Liverpool ha gastado cerca de US$60 millones
por Stewart Downing y Jordan Henderson; otros $13 millones por el mediocampista
escocés Charlie Adam; casi US$40 millones por el uruguayo Luís Suárez y US$57
millones por el delantero Andy Carroll, que se convirtió en el jugador inglés
más costoso de la historia.
Tales
cantidades no siguen exactamente el mantra de comprar jugadores talentosos a
bajos precios que profesa el modelo estadístico, pero un estudio de los
atributos de los nuevos jugadores de Liverpool revela que hay una fórmula
bastante similar detrás de la estrategia del club.
De
manera general, las compras de jugadores de Liverpool revelan todos los riesgos
y misterios asociados con la adaptación de los análisis estadísticos a un juego
que aún los cuestiona. Incluso Henry, que debe su fortuna a sus estrategias
matemáticas en los mercados financieros ve un límite al uso de las cifras en un
juego tan dinámico como el fútbol.
"Determinar
lo que genera un gol es mucho más complicado que determinar lo que genera un
cuadrangular", escribió Genry en un email esta semana.
La
mayoría de gente concuerda que nadie ha descubierto el algoritmo que revela el
valor de un jugador para un equipo. El asunto es que quizás hay demasiada
información. Las compañías que recolectan datos miden cerca de 300 aspectos por
juego sobre cerca de 2.500 movimientos de jugadores.
Las
cifras también pueden ser engañosas. Warren Barton, ex jugador de Inglaterra y
comentarista de Fox Soccer Channel, dice que un jugador puede recorrer una gran
distancia, lo que sugiere una resistencia superior, pero puede no mostrar mucha
velocidad o intensidad. Un mediocampista puede tener una tasa de 80% de
efectividad en sus pases, pero estos pueden ser cortos o a los costados.
El descubrimiento
hecho por el asesor y gurú de las estadísticas de los Medias Rojas de Boston
Bill James hace una generación fue que los equipos de béisbol pueden anotar más
carreras si consiguen poner a más corredores en base, de cualquier forma y por
lo tanto crear más oportunidades para anotar.
Liverpool
terminó sexto en la Liga Premier la temporada pasada en parte debido a los 59
goles anotados en 38 partidos. Esta cifra estuvo muy por debajo de la de
Manchester United, que anotó 78 goles. En cuatro de las últimas cinco
temporadas, los cuatro primeros equipos en la tabla fueron los que más goles
anotaron, con la excepción de Manchester City en la temporada 2009-2010 en la
que quedó quinto, pero anotó más goles que Tottenham, que quedó tercero.
Para
solucionar esta escasez, Liverpool tiene la misión de crear más oportunidades
de gol— el equivalente a tener más corredores en base— incluso si esto implica
apostar por un grupo de jugadores que, con la excepción de Suárez, tienen poca
experiencia internacional o en la Liga de Campeones.
Por
ejemplo, Downing, Adam y Henderson estuvieron entre los principales ocho
creadores de opciones de gol en la última temporada de la Liga Premier, de
acuerdo con el recopilador de estadísticas Opta Sports. El mediocampista promedio
de la Liga Premier crea aproximadamente 1,21 oportunidades por partido, pero
Adam creó 2,06 por encuentro la temporada pasada en promedio, en tanto que
Downing y Henderson, crearon 2,24 y 2,22, respectivamente.
Esos
tres produjeron alrededor de 750 centros de gol la temporada pasada , con una
tasa de aciertos de más de 24%, un poco por delante del promedio de la liga.
Cinco de las ocho asistencias de Adams se originaron en centros, en tanto que
ningún jugador de la Liga Premier hizo más centros exitosos en las tres últimas
temporadas que Downing. Desde comienzos de la temporada 2004-2005, solamente
cuatro jugadores generaron más oportunidades que Downing en los partidos de la
Liga Premier: Frank Lampard, Cesc Fábregas, Steven Gerrard y Ryan Giggs.
"No
es tanto un puntero, la estadísticas lo muestran", dijo Comolli en el
sitio web del Liverpool, luego de la llegada de Downing.
La
sabiduría convencional sugiere que esas cifras deberían mejorar si el trío
envía pases a un grupo de delanteros y mediocampistas de más clase que los que
tenían en sus clubes anteriores. La esperanza es que una buena parte de los
pases se conectarán con Carroll (que mide 1,91 metros), cuya especialidad es
cabecear a gol.
Aún
así, hay quienes cuestionan si bombardear el área de un oponente con envíos
aéreos es una táctica efectiva. La tasa de centros completados que terminan en
gol rara vez supera el 25% del total. La posibilidad de marcar gol tras un
centro es de apenas 5%.
Pero
Liverpool también tiene a Suárez, que tiene uno de los pies más creativos del
planeta. Suárez llegó la temporada pasada luego de anotar 102 goles en cuatro
temporadas en el Ajax. Tiene tendencia a la rabietas propias de un niño y fue
suspendido la temporada pasada por morder a un rival, pero tiene enormes ventajas
si Liverpool logra enfriar su cabeza.
No
importa lo que digan los números, es una apuesta segura decir que los días de
búsqueda de gangas terminaron. La ola de gastos del Liverpool lo muestra.
"Todos los jugadores que se compran hoy valen una fortuna. Esos son los
precios de hoy, hay que simplemente vivir con eso", dijo Roy Evans, el ex
director técnico del Liverpool.
MATTHEW FUTTERMAN y JONATHAN CLEGG - WALL STREET JOURNAL
RECOPLILACION FUTBOL FORMATIVO
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